27.12.06

Sobre la decisión

Hace un par de posteos dejé una frase que me abrió los ojos en varios aspectos, se las recuerdo:

"una decisión es buena cuando surge de la vida; es mala cuando surge de la cabeza"

Y era de esperar que me deje limando y pensando sobre distintas decisiones que tomé en mi vida... o mejor dicho: ¿tomé decisiones ,o sea, malas decisiones, o tuve en algún momento la capacidad de que surjan de la vida, o sea, buenas decisiones? Creo que lo real es que siempre tomé decisiones, es decir, malas decisiones.

Ahora estoy llegando a una conclusión, que quizás suene muy simple y obvia, pero no parece tan fácil de entender: Las decisiones no existen.

¿Por qué? Creo que en el momento mismo en que surgen dos opciones contrapuestas sobre las que decidir ya no hay solución alguna. Por el solo hecho de ser dos opciones contrarias, dilemáticas. Podremos eventualmente elegir quedarnos con una de ellas, pero la otra va a quedar ahi regulando, no se va a borrar como si ya no existiera. Quizás por eso es tan dificil tomar decisiones, es decir, elegir una opción u otra.
Lo cierto es que en cuanto surge la necesidad de decidir, es decir evaluar cuál de las dos, o más, situaciones elegiremos, ya estamos en el terreno de la no solución, y por eso me parece que las decisiones de la cabeza son malas decisiones, porque tienden despejar una tendencia de nuestro corazón para quedarse con la otra, y esto es a la fuerza. Nuestro corazón quiere ambas y por eso siempre aunque decidamos por un lado, va a quedar la otra opción haciendo conflicto... muchas veces en forma de "¿pero y si me quedaba con la otra opción?".

En fin: cuando hay que tomar una decisión no existe solución alguna, sino más bien resignación. No llegamos a ningún lado... Pero es cierto que tampoco podemos tomar todos los caminos al mismo tiempo... si apenas podemos con uno...

Y acá entra esto de que "una decisión es buena cuando surge de la vida".
Creo que esto está diréctamente relacionado con las tendencias del corazón, de los sentimientos, y hasta diría del "lo que tienga que ser, será".
Creo que una situación va a ser la mejor para uno cuando es la vida la que lo lleva a uno, no a a elegirla, sino a vivirla. Cuando algo surge de la vida, no es necesario elegirlo. Es lo que ocurre con el amor: en el mejor de los casos, surge de distintas situaciones, porque si, no podemos controlarlo... y una cosa va llevando a la otra.
Los problemas aparecen cuando se "deben" tomar decisiones, o sea, cuando alguno se plantea una pregunta sin solución alguna. En primer lugar, porque creo que lamentablemente nuestras malditas mentes (o sea nosotros) no soportan/mos ser llevadas/os por la vida, algo que no controlamos, y por ende nos empeñamos todo el tiempo en tomar las situaciones que la vida nos da para contraponerles su opuesto. Es decir, opuesto que de seguir el curso natural de las cosas ni siquiera se hubiese presentado: Ideamos el contrapuesto ¿y qué obtenemos? La vieja y conocida "corazón vs mente", que se da en dos pasos básicos, a los que les llamaré "pasos básicos para auto-cagarnos la vida"

1. Mentalmente creamos una alternativa que nunca existió, opuesta a la que la vida/corazón nos llevó.
2. Necesitamos poder oponer ambas situaciones en el mismo nivel, por tanto, racionalizamos la situación de la vida (es decir, la degradamos), convirtiéndola en otra imagen mental, en una nueva idea.

¿Por qué no hacemos lo contrario, es decir, convertir la nueva invención mental en vida/corazón? Simple, porque esa parte no podemos controlarla. Y como todo lo incontrolable, la única manera de "controlarlo" es enjaulándolo, aprisionándolo en un ambiente controlable... o que presumimos controlable... Y ¡Sorpresa, no podemos controlarlo! Y hacemos cagadas: siempre, pero SIEMPRE, terminamos eligiendo nuestra ideación mental, y nunca la de la vida, la del corazón. ¿Que ironía no? Si, somos estúpidos: Cuando vemos que no podemos controlar el bardo que armamos en nuestra cabecita por afan de control, elegimos la idea que creemos podemos controlar... Por lo menos la creamos nosotros ¿no?. Egocéntricos y pelotudos.

Y no hace falta que diga que es un círculo vicioso, regresión al infinito: para poder controlar elegimos lo que creemos controlable, nos encontramos con que no lo es, y para salir de ese quilombo, volvemos a elegir con el mismo estúpido parámetro.

En fin, creo que las "decisiones" surgidas de la vida, no son tales, no son decisiones, sino que son situaciones en si. No se eligen, sino que de golpe las estamos viviendo, sin previo aviso.
Y de acá me surge otra cosa positiva, a favor de las "situaciones surgidas de la vida": son el presente, y es el presente donde estamos, y el único "tiempo" donde tenemos la posibilidad de vivir. En cambio, las decisiones se basan en el pasado (que no son más que recuerdos) o en el porvenir (que no es más que imaginación), y frecuentemente, SIEMPRE diría, nos hacen olvidar lo que estamos viviendo en ese preciso momento: el presente, muchas veces hermoso, otras una cagada... pero lo que tenemos.

Como me dijo alguien hace muy poco: Pensamos tanto que nos olvidamos de sentir...

Un saludo a todos

17.12.06

A resignarse

Hace unos días, leyendo, me encontré con algo que me llevó decididamente a la resignación...
En fin, para qué explicarlo si puedo dejarlos con el original.
La cita es la siguiente

"La gran pregunta que nunca ha sido contestada y a la cual todavía no he podido responder, a pesar de mis treinta años de investigación del alma femenina, es: ¿qué quiere una mujer?" (S. Freud)

En fin, creo que si este investigador perseverante no pudo responder(se) eso, y encima, esa pregunta sigue sin respuesta en nuestros tiempos, no nos queda mucho más por hacer... y qué digo "mucho más", no nos queda nada por hacer al respecto.

De todas maneras, creo que nuestro gran problema, o sea el gran problema de los hombres, del sexo masculino(y al final, de la humanidad), es el suponer que en algún punto dicha pregunta tiene alguna respuesta y buscarla constantemente, sea preguntando, sea deduciendo, sea interpretando, sea por ensayo y error (dándo/haciendo cosas para/por las mujeres a ver si la pegamos con lo que quieren, etc.), o como sea.

Lo real creo que es que ni ellas mismas tienen idea de qué quieren... (y no estoy bardeando, tomenlo como texto científico eh).
Si alguien lo supiera -o si al menos tuvieran una pequeña pista, la más mínima- no existirían cosas tales como el deseo, la angustia, la infidelidad (en ambos sexos digo), la histeria... entre otras cosas, todas vitales para poder proseguir día a día con nuestra complicada vida.

Hasta la próxima

10.12.06

GROSO

"una decisión es buena cuando surge de la vida; es mala cuando surge de la cabeza"

Una frase que recién, cuando la encontré, me pegó un golpe en medio de la cabeza. Creo que un palazo en el coco no me hace el mismo efecto.

Espero la puedan disfrutar tanto como yo.

Hasta la próxima.